Hilda Irma Pérez Ríos
Ayer miserable me sentí
por culpa del Día,
que no me dejó salir
y del Sol,
que no me dejó llorar.
Miserable
hice sentir a la Noche,
porque me faltó brillo.
Me faltaron fuerzas para reír
- para reírme del Sol.
Miserable fue el Tiempo
y la existencia reglamentaria de un día
y una noche...
Miserable fue el Viento
que no logró llegar hasta mí.
Somos independientes
pero al final formamos uno solo:
el Universo.
Son el Día y el Sol;
la Noche, el Tiempo y el Viento.
Miserable ayer me sentí
porque mi brillo no iluminó la noche;
miserable siento que soy,
porque soy La Luna,
que no tiene brillo propio.
brillar a través de una luz ajena es también uno de mis mayores conflictos
ResponderBorrarsobretodo cuando creo que esa luz proviene de una estrella que ya no existe
... hermoso...