Entre gripes cósmicas, bioterrorismo, simulacros mundiales, efecto-chupacabras, cortinas de humo, importaciones de Obama, inventos del gobierno, pretextos para solicitar préstamo multimillonario y otras teorías, basadas en dudas tales como "¿dónde están los muertos?", o exigencias como "¡nombres... quiero nombres!"; o bien, alarmas infundadas sobre desabastos en supermercados, contagios por carne de cerdo, ataques discriminatorios y racistas contra mexicanos (a nivel mundial) y defeños (a nivel nacional), la red también demuestra su capacidad para desinformar.
Cadenas de mails, blogs, foros, diarios virtuales, sitios de microblogging, páginas web, salas de chat, portales... toda la red se ha utilizado para actualizar la información minuto a minuto, aunque no todas las referencias y los datos son confiables. Y algunas de esas reacciones preocupan pues sus posibles consecuencias son la apatía o la paranoia, ambas igual de peligrosas.
Necesitamos desarrollar un filtro para saber que tipo de información ayudamos a difundir.
Cadenas de mails, blogs, foros, diarios virtuales, sitios de microblogging, páginas web, salas de chat, portales... toda la red se ha utilizado para actualizar la información minuto a minuto, aunque no todas las referencias y los datos son confiables. Y algunas de esas reacciones preocupan pues sus posibles consecuencias son la apatía o la paranoia, ambas igual de peligrosas.
Necesitamos desarrollar un filtro para saber que tipo de información ayudamos a difundir.
Lástima que nos demos cuenta de todas estas cosas cuando el daño está hecho (por lo menos en parte). Lo que fue un frenesí informativo devino en una indiscriminada orgía de información tergiversada, alarmista, pseudocientífica y conspiranóica.
ResponderBorrarPor desgracia, ahora es difícil distinguir las noticias fidedignas de aquellas generadas por el terror, la paranoia o el simple sensacionalismo.
Cuánta basura mediática circulando; cuánta desinformación, información contradictoria y alarmista. A estas alturas, uno ya no sabe ni qué creer.
ResponderBorrarBusquemos ese filtro protector.
Abrazos
es cierto, la confusión informativa es terrible, especialmente porque su origen es la desinformación en que nos tienen las autoridades, a la reacción tardía se suman la especulación con que han ido dando las cifras, y la contradicción de algunos, por ejemplo, la declaración del director del centro nacional de vigilancia epidemiológica y control de enfermedades de la secretaría de salud (al diario el país) sobre que los cubrebocas no sirven y sólo son para que la gente se sienta segura
ResponderBorrarQué putada
ResponderBorrarpinche Benito Juárez con cubrebocas...
Recuerdo que hace tiempo en la tele estatal el Virrey de Chiapas, que diga el Señor Gobernador, preguntaba al Secretonto, que diga al Doctor Secretario de Salud si los cuberbocas servían para algo...
El doc trató de explicar que no, pero el gobernador insistía y así como con cara de "son las horas que usted diga" dijo que sí formaban parte de la protección contra la enfermedad...
Azul me dijo que el tío este no quería arriesgarse a perder su huesito por contradecir al gober, pero para mí es un tonto... si tiene las bases para decir que no sirven, pues que diga que no sirven!! Tiene los pelos de la burra en la mano para decirlo, pero no... El Gober le salió más chingón.
Dónde estás Doctor Kumateeeeeeee
es vergonzoso como manejan la información, otro de los más idiotas es el gober analfabetoso de veracruz, haciendo declaraciones que culpabilizan a china
ResponderBorrary en el sendero del peje hay una campaña de reclamos escritos contra los países que cancelaron vuelos, escrita de una manera de lo más chantajista y visceral, echándoles en cara que afecten el ingreso de meseros y otros trabajadores que dependen del turismo, que poca m...emoria!, pareciera que no fueron ellos los que afectaron el empleo de miles al secuestrar reforma y el centro histórico