jueves, 12 de febrero de 2009

Dossier. EL AMOR. LA FÓRMULA QUÍMICA

Hay dos cosas que el hombre no puede ocultar: que está borracho y que está enamorado
Antífanes -388-311 a. C.-, comediógrafo griego



Pues ni cupido, ni el corazón: es el sistema nervioso el culpable de que tu respiración se entrecorte y te suden las manos; son las hormonas las que te hacen sentir que lepidópteros revolotean en tu cavidad estomacal. ¿Qué no es romántico decirlo así?, acostúmbrate, olvídate de cursilerías, de cancioncitas de Maná y de margaritas deshojadas. El amor, mi herman@, no es una cosa esplendorosa, es bioquímica llana y prosaica.
Yo sé, yo sé... a mí también me dijeron que era eterno y que entraba por los ojos (bueno, en los hombres por el estómago -je), pero, hete aquí que es un proceso que parte de la corteza cerebral, llega a las neuronas, las cuales envían el mensaje al sistema endócrino y, vualá... estás enamorado (o enfermo, desde un punto de vista neurológico: en un estado de demencia temporal -siempre tuvo razón Shakin Stevens-).
Y la verdadera protagonista de esta historia de amor es la feniletilamina, de esa bienavenida y aristocrática familia de las anfetaminas. Producida por el cerebro, -villano manipulador- que al llenarse de esta sustancia responde segregando dopamina (ese compuesto seductor, responsable de la repetición de comportamientos placenteros), oxitocina y noradrenalina (¡ah!, ¿y tú pensabas que el nombre de Carlos Roberto Augusto era complicado?). A esa oxitocina no hay que perderla de vista, ¿eh?, tiene un papel importante en la historia, con decirte que es el mensajero químico del deseo sexual.
La trama de esta historia romántica se puede explicar así: en la cascada de reacciones emocionales hay electricidad (descargas neuronales) y hay química (hormonas y otras sustancias). Ellas, junto con el hipotálamo -desde el sistema nervioso-, son las que intrigan para provocar el descontrol en tu vida desde que l@ viste pasar ese día lluvioso, cuando chocaron al dar vuelta a esa esquina, o cuando se desocupó el único asiento a tu lado.
Tú sabes que siguió: el corazón aumentó su frecuencia, la presión arterial subió, se liberaron grasas y azúcares aumentando la capacidad muscular, así como los glóbulos rojos para mejorar la oxigenación. Y te dió su teléfono.
Desde ahí l@ amas con toda la fuerza de tus neurotransmisores.
Ellos, y no los hechizos, esos nervios microscópicos son los que transmiten impulsos a todos los capilares, folículos pilosos y glándulas sudoríparas del cuerpo; el suave músculo intestinal, las glándulas intestinales, la vejiga y los genitales son artera y alevosamente manipulados con instrucciones para constreñirse, dilatarse, secretar y erectarse impelentemente. Todo tu organismo está coercionado, además, para considerar a la razón como una intrusa.
Hasta las personas más brillantes pierden el control y dejan de ser productivas, liberadas las zonas que controlan las emociones, y segregadas las sustancias que actúan como drogas, el enamoramiento es, ahora, imparable. Y fue que te escuchaste decir: "Sí, acepto".
Pero ¡aguas!, yo sé que le crees a Juan Gabriel y a Corín Tellado, pero siento decirte que no es eterno, el amor y la bioquímica decaen, tal como Ortega y Gasset acertó al definirlo como "una imbecilidad transitoria"; el dormir poco, comer menos y tener la mente secuestrada por esa personita sólo puede durar cuatro años a lo sumo, si sigues a su lado lo que viene entonces es el compañerismo, el afecto y la tolerancia, y necesariamente tendrás que cambiar tus expectativas para continuar juntos -como bien lo explica Javier Krahe-.
También los roles de los personajes se van adecuando a la prolongación de tu telenovela: la testorona mantiene el deseo sexual, la dopamina y la noradrenalina, tus cómplices durante la etapa de euforia y atracción, ahora fortalecerán el vínculo emocional, y esa oxitocina tramará como hacer la relación duradera. ¿Cómo lo hace? Celestinamente cambia las conexiones de los miles de millones de circuitos cerebrales. Y sin que tú lo supieras fue forjando lazos permanentes desde la primera etapa de tu enamoramiento, para que surgiera el apego (que psicológicamente, es la etapa considerada como el verdadero amor). De la misma mañosa forma en que también estrecha la relación madre-hijo, y está presente tanto en el parto como en el orgasmo, provocando esa sensación de inmensa ternura. ¡Ah!, en toda historia siempre hay alguien así.
Ahora que, si sientes que algo te revolotea en el estómago, tal vez sólo sea el gas de la última coca-cola.

Nota: dale click a las imágenes para agrandarlas.

BiBlografía

El rincón de la ciencia

4 comentarios:

  1. No pues que chido blog, eso del enamoramiento y el amor ya lo sabía pero no veo como relacionarlo con sus respectivas sustancias químicas, para mí eso de la bioquímica lo veo casi tan complicado como la mayoría ve complicadas a las mates.

    Eso de mariposas en el estomago no es más que el correr de la sangre que se va del estómago a otras partes como los labios, mejillas y otras zonas donde el sexo contrario suele fijarse, es un arma más para lucir más atracivo y para lograr seducir a la persona que te provoca ese "revoloteo en el estómago".

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  2. Hermosa malbichito siempre es un gusto leerte (aquí y en el blog)

    Agradeciendo de paso tu comment te comento jiji que yo tampoco me acostumbro a esa plantilla ya q originalmente tenía otra pero ps ya ves...

    Muy ilustrativo tu post y debo confesar que me encanta andar con las buterflies en la panzita

    Saluditos!

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  3. @anónimo
    gratzie!

    @reidiojed
    sí, suena más complicado que cuando sólo se trataba de un flechazo de cupido -je-, y a veces ese revoloteo en el estómago sólo resulta ser una cantidad severa de pizza y cerveza, no?

    gracias por la visita! (espero se repita)

    @supertkt
    para mí también es un gustazo mi supertekate!

    fíjate que al principio lamenté no tener esa plantilla pero ahora me gusta más ésta, además de original ya le agarré cariño

    y a quién no le gusta esa sensación?, aún cuando no resulten mariposas sino viles polillas, lo que importa es el cosquilleo ;)

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