Marla, fue comparada con Jackson Pollock y hasta con Pablo Picasso. Entendidos del arte la proclamaron genio del impresionismo abstracto. Sus cuadros se llegaron a vender hasta por 300 mil dólares.
Tenía cuatro años.
La fama la lleva a la televisión. Más bien, la televisión llega a su casa. 60 minutos le dedica un reportaje. En él se ve a su padre dirigiéndola, su padre es pintor amateur. Se ve también a una Marla cansada, fastidiada, y a una madre conminándola a continuar. La otra protagonista es una crítica de arte que, lapidaria, niega todo rasgo de genialidad en la obra. Sólo ve a una niña adorable pintando como cualquier otro niño de kinder, con la salvedad de que ella es dirigida.
No es lo único. La reacción de los padres al ver el reportaje es filmada por Amir Bar-lev, que hacía un documental sobre la famosa familia Olmstead. Para probar el genio de su niña, permiten filmar a Marla pintando. Sin embargo, el cuadro del video no se parece al que se exhibe físicamente al final, que parece haber sido retocado -y mejorado-. Un segundo cuadro es filmado durante todo su proceso, pero no se parece a los demás. Las dudas surgen, no sólo hacia la ética de los padres de Marla, también al proceso de documentar la realidad, y a la concepción misma del arte abstracto. My kid could paint that es el resultado de esa intrusión en la vida de una niña que se divierte -a veces- pintando.
Vía
Tenía cuatro años.
La fama la lleva a la televisión. Más bien, la televisión llega a su casa. 60 minutos le dedica un reportaje. En él se ve a su padre dirigiéndola, su padre es pintor amateur. Se ve también a una Marla cansada, fastidiada, y a una madre conminándola a continuar. La otra protagonista es una crítica de arte que, lapidaria, niega todo rasgo de genialidad en la obra. Sólo ve a una niña adorable pintando como cualquier otro niño de kinder, con la salvedad de que ella es dirigida.
No es lo único. La reacción de los padres al ver el reportaje es filmada por Amir Bar-lev, que hacía un documental sobre la famosa familia Olmstead. Para probar el genio de su niña, permiten filmar a Marla pintando. Sin embargo, el cuadro del video no se parece al que se exhibe físicamente al final, que parece haber sido retocado -y mejorado-. Un segundo cuadro es filmado durante todo su proceso, pero no se parece a los demás. Las dudas surgen, no sólo hacia la ética de los padres de Marla, también al proceso de documentar la realidad, y a la concepción misma del arte abstracto. My kid could paint that es el resultado de esa intrusión en la vida de una niña que se divierte -a veces- pintando.
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6 ideas en tránsito:
Ni idea tenía de la existencia de esta niña. A saber cuál sea la verdad; aún así, a los cuatro años... los niños nomás hacemos rayones sin ton ni son y esta niña parece tener talento.
Como soy medio antique, la pintura de Jackson Pollock nunca me ha emocionado mucho. Recuerdo que hace un par de años, un cuadro suyo se vendió en algo así como 150 millones de dólares. Cuando vi ese "obra maestra", me acordé de los trabajos que hacía mi primo, a los 5 años en el kinder, solo que él trabajaba sobre fondo negro, pero el chamaco tenía (o tiene) mucho talento y creatividad. Y pensar que su madre, un día que hizo limpieza al armario... los botó a la basura.
Buen finde
.
ja, ja... esas mamás cómo se deshacen de grandes tesoros, no?, un día un sobrino (a los siete años) tenía una colección de corcholatas con números de una promoción de pepsi, todos los días se daban los números ganadores y de tanto checar los suyos ya se los sabían de memoria sus primos y él, una noche dijeron un número que identificaron de inmediato, el premio era de un millón de pesos, pero cuando las buscaron no las hallaron nunca, mi hermana había hecho limpieza esa tarde y las había arrojado al camión de la basura (pudimos ser ricos -sniff-)
yo también pintaba como pollock sin saber que él comercializaba esa técnica, yo decoraba mis cuadernos, lapiceros y carpetas con "obras de arte" como la suya, jugando con los colores y las texturas, pero no tenía cuatro años sido alrededor de diez más, tal vez por eso a nadie le hacían mucha gracia -je-
feliz fin de semana chuycita!!
Origa oooooriga!!
Yo le tenía envidia a los niños que salían en un programa que se llamaba That's Amazing o That's Incredible, creo que ese. Hasta que supe que ese programa lo cancelaron muchos años antes de mi nacimiento.
Ya no me daba envidia, me daba coraje porque ya no tenía un espacio para presumir mi genialidad... hasta que nació blogspot. jejeje
y entonces, cuál es la excusa???
-je-
que feo que los padres enseñen a sus hijos desde peques a ser deshonestos y tramposos
y q triste como queda la niña al descubrirse que su "talento" no es real
buen post
si son listos, a la niña no le perjudicaría en nada, pero así como se ven lo que van a lograr es cansarla con tanta presión y matar la creatividad natural de la pequeñita
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Ideas en tránsito